Parador de Ávila

Este parador de cuatro estrellas se encuentra ubicado en un magnífico edificio histórico protegido, en pleno centro de la ciudad, y adosado a parte de la muralla.
Se llama Raimundo de Borgoña, posee restos arqueológicos en su jardín, y un magnífico patio interior acristalado. Cuenta con 46 habitaciones dobles y cuatro con salón, algunas de ellas con cama con dosel, para recordarte que estás en el interior de un palacio.
La cocina de su restaurante es contundente, judías del Barco, carnes de la tierra, patatas revolconas... Adecuada para soportar el intenso frío en los inviernos de la ciudad.

En el casco antiguo de Avila se ubica este estupendo Parador. Es un palacio del siglo XVI, por dentro conserva mobiliario de la época. Las habitaciones muy bonitas con un toque agradable y cálido. Los jardines son muy bellos con restos arqueológicos. El restaurante es muy bueno, pedir el chuletón de Avila no defrauda.

Vas paseando por el jardín y tiene historia, te da información sobre los árboles que tienen en el jardín. Dentro del hotel tiene muchas salas para descansar y son una pasada. Las habitaciones muy espaciosas.

Situado en un Palacio adosado a la muralla, todo resulta encantador, desde las habitaciones (nos alojamos en habitación con dosel) hasta los salones, cafetería, patio y los magníficos jardines donde hay una terraza para poder tomarse una caña.

El Parador de Turismo de Ávila es unlugar asombroso que se encuentra justamente en la hermosa ciudad de Ávila.

Sin duda alguna es lo mejor de toda la urbe. Cuenta con un personal muy atento y ágil que te ayudará en todo momento en toda tu estadía.

El Parador de la histórica ciudad de Ávila ocupa el señoril edificio noto como "Piedras albas", al lado de las murallas.

El diseño interior se caracteriza por un ambiente intimista y acogedor. Los detalles de los elementos del palacio dan un toque majestuoso al interior: Grandes habitaciones con camas con dosel, colores fuertes, suelos en granito.

Las demás estancias comprenden unos salones modulables, una cafetería, un jardín con restos antiguos y un maravilloso patio. La cocina ofrecida por el comedor incluye cochinillo asado, pucheretes teresianos, judías del barco, chuleta

Como todos los paradores de España, situado en la parte baja, pero muy bien situado y céntrico.