El parque nacional de Krka no sólo ...
El parque nacional de Krka no sólo tiene unas maravillosas cataratas, también está repleto de bosques y paisajes cautivadores que se pueden recorrer gracias a los senderos que se han creado.
Siguiendo los caminos que surjen en la catarata principal, en Skradinski Buk, vamos a poder disfrutar de unos paisajes repletos de rocas, riscos, cuevas y simas espectaculares. Por ejemplo, si se va por la zona donde se encuentra el cañón de Medu Gredama, vamos a encontrar unos riscos de más de 150 metros de altura que tienen unas formas increíbles, mientras que si vamos por el primer kilómetro del lago podremos disfrutar de unas zonas preciosas donde los protagonistas son los juncos y las espadañas. Otros paisajes que podemos encontrar en este parque son bosques de encinas cautivadores y bosques de robles blancos que llaman mucho la atención.
Otra de las cosas que se puede ver en el parque nacional y que tiene un gran encanto es el monasterio de Krka. Se encuentra en uno de los puntos más septentrionales del parque y es un edificio ortodoxo que también se conoce por el nombre de Arandjelovac (sagrado Arcángel). Este monasterio se estuvo construyendo y reconstruyendo hasta finales del siglo XVIII y combina de una forma muy peculiar la arquitectura bizantina y la mediterránea. Además, tuvo un valioso inventario del siglo XIV del que todavía se conservan algunos restos.
Dentro del paisaje de este parque nacional también destacan los animales. Durante la visita podemos encontrar todo tipo de especies. Es bastante fácil ver ranas y sapos de mil colores que habitan en las charcas y tampoco es muy complicado toparse con serpientes, sobre todo en determinados tramos del parque donde los bosques son muy frondosos, así que hay que ir con los ojos bien abiertos para no pegarse un buen susto.


