World will miss you
Ni una semana después de la muerte de Steve Jobs, fuimos a las oficinas de Apple en Palo Alto. Se podía sentir el aire de tristeza que todavía circulaba en sus alrededores. Los devotos se acercaban hasta aquí, algunos desde lejanos lugares, para dejar todo tipo de ofrendas: antiguas y modernas máquinas, ramos de flores, dedicatorias,... Cada uno a su manera mostraba su agradecimiento al Genio de la manzana mordida, cuya bandera todavía lloraba a media asta junto a la de California y USA. :(