Oasis Palmeral de Igrane

Muchos pensamos que en el desierto no hay agua... ¡Que equivocación! ya que donde menos te lo esperas, las gentes de estos lares consiguen "robarle" a la arena este bien preciado elemento.

En la localidad de Hassilabied a pocos kilómetros de la archifamosa Merzouga se encuentra un pequeño palmeral-oasis que además se ha convertido en una cooperativa de familias para aprovecharlo como huerto, podemos apreciar el maravilloso mundo de las canalizaciones de agua a través de pozos que funcionan por la pendiente natural del terreno, así como un conjunto de acequías que dan vida a la zona.

Las dunas del Erg Chebbi dan el toque mágico y naranja haciendo un bello contraste con el verde de las palmeras y de las pequeñas huertas.