Nakamise-dōri

Hay una pintoresca calle peatonal que lleva hasta el templo más conocido de Tokio, el Senso-ji. Toda ella está llena de puestos en los que se ofrecen desde frutos secos a abanicos, pasando por alguna cómida sencilla y sabrosa que tomar como tentempié o incluso bonitas muñecas japonesas. La verdad es que se hace complicado salir sin comprar nada, sobre todo teniendo en cuenta que aquí los precios no son excesivamente altos.
La calle además es muy bonita porque se adorna dependiendo de la época del año. Yo fui en octubre y todo estaba lleno de hojas doradas y rojizas.

Entre las muchas cosas que se pueden cuando se visita el templo Sensoji de Tokio está Nakamise dori, una calle entre las puertas del templo llena de puestos de comida, de artesanía y de recuerdos de todo tipo.

Es un buen lugar para tomar un bocado ligero mientras se recorre el templo, o bien comprar regalos para la familia. Y buscando se pueden encontrar bonitas muñecas tradicionales con garantía de calidad a mejores precios que en otros lugares.

En cada estación del año esta calle se decora con motivos como hojas doradas en otoño o flores de cerezo en primavera.

Nakamise es la pequeña calle comercial que se encuenra entre la puerta de Kaminarimon y el templo Sensôji en Asakusa, Tokyo. Está llena de tiendecitas en las que venden todo tipo de suvenirs, desde los más tradicionales a los más estrambóticos, así como pastelitos típicos de pasta de judías rojas.