La ciudad palatina de Mantua.
El Palacio Ducal (o más bien ciudad palatina) de Mantua está impregnado en cada rincón de la pasada gloria de los Gonzaga, quienes transformaron este conjunto de edificios para albergar una de las cortes más fastuosas de Europa y recolectaron una de las pinacotecas más exquisitas que haya existido, aunque, lamentablemente, muchas de sus obras maestras se encuentran ahora dispersas por el mundo. Sin embargo, la colección que alberga actualmente es más que suficiente para hacerse una idea del refinado gusto de esta familia, bajo cuyo mecenazgo trabajaron algunos de los artistas más grandes de la historia como Andrea Mantegna, Pisanello, Rafael, Giulio Romano o Rubens.