Una joya desapercibida
Todo el que llega a Pamplona busca los escenarios y lugares del encierro dejando de lado joyas patrimoniales y culturales como el Museo de Navarra que se sitúa junto a la famosa cuesta de Santo Domingo, el lugar donde comienza el encierro.
Merece la pena visitar el único ejemplo renacentista de la ciudad que contiene valiosas obras de arte entre ellas alguna de Goya, así como un recorrido histórico de piezas desde la prehistoria hasta nuestros días.
¡No todo es San Fermín en Pamplona!