Doloroso testigo del pasado kosovar
En el centro histórico de la ciudad de Pristina –capital de Kosovo- se encuentra un icónico monumento de concreto construido bajo las órdenes del Mariscal Josip Broz Tito cuando aún existía la República de Yugoslavia. En idioma albanés (el más comúnmente hablado por la población kosovar), el sitio es comúnmente llamado “tre rremëshi” –“tres ramas”, y su objetivo original era promover el concepto de la Hermandad y Unidad ideado por Tito como ideología unificadora entre las regiones yugoslavas.
Si bien ha habido numerosos intentos por tirar abajo el monumento, ninguno ha logrado conseguir la realización del referéndum necesario para su destrucción. Buena parte de la población local siente el sitio como un recuerdo de la represión constante por parte del gobierno serbio antes de la declaración de independencia de Kosovo.