Carlos Millán Gómez
Un monasterio a la orilla del Ebro
A la orilla del Ebro, en un vergel rodeado de un paisaje desértico, se encuentra el monasterio cisterciense de Rueda de Ebro, que recibe su nombre de la rueda (la noria) que sube el agua desde el río y la distribuye, por medio de un acueducto gótico y de una red de tuberías, por todo el monasterio. Restaurado hace no muchos años, Rueda es como una maqueta de un monasterio cisterciense tipo. No muy grande pero de una enorme calidad, visitarlo es un verdadero lujo.