Parte alta de las Hoces del Huécar
Se hace tarde pero no quiero irme de Cuenca sin llevarme una amplia visión de lo que es la ciudad en su conjunto, tanto de la parte antigua, monumental, como de la parte moderna y para ello nada mejor que coger el coche y dirigirnos hasta el Cerro Socorro en la parte alta de las Hoces del Huécar.
Salimos de la ciudad bordeando el río Huécar y pasamos al lado del Parador Nacional de Turismo y convento de San Pablo. Hacemos una breve parada para contemplar esta maravillosa y bien conservada construcción y continuamos el camino bordeando el río. Antes de llegar al kilómetro 5, a escasos cincuenta metros, giramos a la derecha y comenzamos la ascensión por una carreterilla que, aunque asfaltada, es lo suficientemente estrecha como para que dos coches que se encuentren deban que tener sumo cuidado. Al final, contemplamos una gigantesca estatua de Cristo que dirige su mirada a Cuenca. Nos apeamos y contemplamos la vista de la ciudad y el campo que la circunda: la parte monumental, la nueva, los típicos barrios del Castillo, Tiradores y San Antón que abrazan la ciudad, el Teatro Auditoro, Ars Natura, símbolos de la modernidad, el Puente de San Pablo, …