Maeping Elephant Camp

Si existe un animal por excelencia con el que el hombre ha compartido el día a día en Tailandia, con permiso de los monos, ese es el "elefante". Tuvimos la gran suerte de poder hacer una ruta a lomos de este increíble animal por la selva, junto al río, precioso, pero además pudimos comprobar las habilidades de estos animales. Desde jugar al baloncesto hasta pintar un cuadro, pasando por una sesión de baile, y tocar instrumentos musicales. Este fué para mi un día bastante especial pues como muchos sabéis, me encantan los animales.

El paseo a lomos de un elefante fue muy bonito aunque al principio me dió un poco de lastima. Luego te dás cuenta de que este animal no tiene ningún problema en llevarte a ti ni a 10 como tú. El guia estaba montado sobre la cabeza del elefante y daba un poco de miedo porque a poco que moviera la cabeza el elefante este podía salir despedido como un cohete contra los arboles. Bueno eso no sucedió, jeje.

Elefantes que bailan, tocan la armónica y la batería; juegan al futból y al voleibol; pintan y dan masajes. Cuesta pensar que este gran mamífero sea capaz de demostrar tanta agilidad e inteligencia, pero es real, es el espectáculo del campamento de elefantes Mae Ping Elephant Village en el norte de Tailandia. Este campamento se creó en 1996 con el objetivo de proporcionar a elefantes y sus cuidadores una oportunidad de sobrevivir tras la ley de conservación de los bosques. Actualmente 70 elefantes y sus cuidadores viven en este campamento, que además beneficia a 150 familias de la zona que venden banano, caña de azúcar y bambú para la alimentación de los elefantes.