Los Toros de Guisando se encuentran en...
Los Toros de Guisando se encuentran en las afueras del municipio de El Tiemblo, en Ávila, siendo uno de los monumentos pre-romanos más conocidos de la península ibérica. Se trata de cuatro esculturas de toros que se cree debían tener importancia simbólica y religiosa para los Vetones, el pueblo celta que habitaba estas tierras antes de la ocupación Romana. Las estatuas están alineadas mirando al Monte Guisando, del que reciben el nombre y podrían datar del siglo II a.C.
Es curioso que, aunque de origen Celta, una de las estatuas tiene una inscripción en Latín en uno de sus costados. Se cree que las estatuas pudieron estar distribuidas por la comarca, a modo de señalización de zonas ganaderas, y que pudieron ser reunidas en un único enclave en tiempos romanos.
Siglos más tarde, en 1468, los Toros de Guisando sirvieron de testigos de la proclamación de Isabel la Católica como heredera al trono de Castilla. Los toros son mencionados también en uno de los pasajes de El Quijote y yo desde luego los recuerdo de mis clases de historia del arte. Debo reconocer que, así de cerca, no tienen un aspecto muy impresionante, pero su historia es de lo más peculiar.
Se llega a los Toros por la carretera AV-502, que es un pequeño atajo entre la M-501 y la N-403, y el acceso es gratuito.


