Experiencia divertida desde el mar.
Cogimos un barco de los que hacen el recorrido por el mar para ver los acantilados de los Gigantes. Si llamaba el Flipper uno y fue una travesía muy bonita y divertida.
El barco salió hacia alta mar para ver como nos seguían los delfines y después nos acercamos a los acantilados para zambullirnos en el agua desde una tirolina. Todo esto amenizado con una buena paella y por la tripulación que era encantadora.