La lobería más antigua
A este lugar está considerado como la primera reserva de lobos marinos de un pelo se llega bordeando la costa del Golfo Nuevo. Allí estos cetáceos marinos que se agrupan en harenes viven en forma permanente y sin migrar a ninguna otra zona y defienden sus espacios con poderosos rugidos para ahuyentar a quienes se atreva a disputarles el espacio. La Reserva fue creada el 29 de septiembre de 1967 y declarada Área Natural Protegida. Desde sus miradores se pueden ver junto a ellos cormoranes de cuello negro que habitan los acantilados y gaviotas en armoniosa y pacífica convivencia en tanto que andando por senderos de flora, gramíneas y matas esteparias nos permite reconocer alguna de ellas que ya hemos visto cuando hicimos el recorrido de los Senderos Interpretativos de Flora en Caleta Valdés y disfrutar de los silencios y la paz que aquí reina entre el azul celeste del cielo y el traslucido e intenso azul turquesa del agua.