La pequeña Italia
No se si puedo considerarme un purista de los viajes, pero cuando visité Little Italy esperaba encontrar un barrio más grande, más puro, al estilo de lo que a lo largo de mi vida había visto en las películas.
Lo que percibí fue un par de manzanas de casas, un poco descafeinadas que daban a entender que los que vivían allí ya no eran esos descendientes de inmigrantes italianos que fueron llegando a cuentagotas o a mares a lo largo de los siglos.
Martin Scorsese creó un imaginario en mí que no era el que yo veía. Él no reflejó el éxodo que durante la segunda mitad del siglo XX hizo que la mayoría de sus residentes se trasladaran a Brooklyn, ni el nacimiento de Nolita ( Norte de Little Italy), donde como setas han ido surgiendo tiendas de moda, panaderías y restaurantes que parecen decorados de cine para aquellos nostálgicos del sabor italiano que han paladeado en series y películas.