El Viajero
Un limón muy dulce
Serían aproximadamente las tres y media de la tarde cuando íbamos hacia el centro urbano de Mairena del Alcor. Como habíamos llegado a la localidad desde el oeste atravesábamos la calle de Cervantes. En su punto final confluye con la avenida de Andalucía, lugar donde encontramos una alargada Alameda junto a la que paramos para curiosear porque el sitio es bonito y agradable.
En la parte central de este parque, que se inicia con la Alegoría a Mairena, famosa escultura de Antonio Gavira que simboliza a la propia ciudad, hay un coqueto local, el Lemon, un local que exteriormente nos dio la sensación de dedicarse al copeo.
Fuera tiene un par de terrazas y en ellas un par de familias con niños tomaban unos refrescos. Asimismo vimos un par de terrazas bajo porches de madera, pero entramos dentro tras saludar a la camarera exterior.
En la parte central está la barra y varias dependencias internas. A ambos lados un par de salas, con luz tenue. Nos fuimos a la barra y pedimos dos refrescos, nos los tomamos, curioseamos el local y nos fuimos tras pagar su importe. Cada refresco a 1.80 euros.
El Lemon está en buen estado, tiene una atractiva decoración y una iluminación intimista. Se define como un local de café y copas, aunque toma un poco de todo. Si alguna vez se os cae la noche y estáis por aquí cerca os recomiendo que os acerquéis al Lemon porque están cerrando sobre las tres de la madrugada.
Antes sólo abrían por la tarde, pero han incorporado el desayuno entre sus opciones y su horario actual es de ocho de la mañana hasta madrugada cerrando, la mayoría de las veces, al mediodía. Hay que apuntarse que abren todos los días.
Es un local vivo, de actividades. Usan cuatro pantallas grandes para echar diversos acontecimientos a la vez, ya sean culturales o deportivos. No son fanáticos de un tipo concreto de música sino que están abiertos a todas las tendencias, también ofrecen conciertos en directo de todos los estilos y diversas exposiciones y fiestas. Los domingos, por ejemplo, llevan a un grupo de flamenco.
El equipamiento se completa con servicios adaptados para discapacitados, acceso a Internet, cervezas de importación, clases de bailes de salón, dardos y DJ en directo. Pero hay mucho más, innovan constantemente y se han convertido en el corazón vivo de la ciudad. Es un local camaleónico, a ciertas horas es una cervecería de moda y a otras una fiesta de disfraces, por ejemplo.
Limitan la entrada a los mayores de 18 años. Supongo que esta limitación la ejercerán cuando hay actividades, en condiciones normales no existe el más mínimo problema.
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