Un oásis en el desierto
Esto es un oasis en el desierto y es literal, justo en medio de un vasto desierto entre arena y cactus de pronto se abre ante tus ojos un lago de color azul, tan cristalino como el agua más pura que hay. El Río Mezquites alimenta esta poza con especies endémicas, como tortugas de bisagra y todo tipo de peces coloridos. No creerías que estás en medio de un desierto. El único problema es que ahora no se puede entrar a nadar, ya que es un ecosistema muy delicado y por fin negaron la entrada a personas, siempre hay una patrulla de las áreas de flora y fauna revisando este sitio. Pero aún se puede ver, solo que tienen que pagarle a alguien en el pueblo porque este rincón no está en el pueblo y los caminos ya se han borrado, solo una persona local te puede llevar.