De la España profunda a la era de internet
Pocas regiones españolas tienen connotaciones tan singulares como Las Hurdes. Territorio abrupto e inaccesible durante generaciones, olvidado en la esquina más desfavorecida de Extremadura, los valles hurdanos fueron paradigma de atraso y marginación hasta hace apenas unas décadas. Pero el escenario ha cambiado radicalmente y lo que antes era una excursión al fin del mundo hoy es una agradable escapada de turismo rural a una de las comarca extremeñas con más personalidad. Las Hurdes ya no son aquel territorio mísero que filmó Buñuel. La era de internet ha llegado también a este apartado rincón cacereño.