Lago de Amatitlán

El lago de Amatitlán no se puede comparar con el majestuoso lago Atitlán (depto Sololá). De hecho, si tienen poco tiempo para pasear por Guatemala, Amatitlán no es parada obligatoria: es más pequeño que Atitlán, sin volcanes alrededor, y tiene fama de contaminado (paradisíaco verdad? ;)).

Ahora, si tienen todo el tiempo del mundo o incluso se están instalando por ahí, Amatitlán puede ser una linda escapada de un día desde la ciudad o desde Antigua (más o menos media hora en coche, un poco más en transporte público).

Yo llegué un domingo, y fue un encanto disfrutar de un ambiente casi de feria, andar entre las familias que venían a pasear. Decenas de ventas de galletas típicas de la zona, ventas de recuerdos, muchos comedores entre el parqueo y la orilla del lago, donde se fríen pescados que la verdad le abren el apetito a uno, pero también patatas, pollos, etc, etc...

El lago de Amatitlán se encuentra a media hora de la ciudad de Guatemala. Es un lago que al origen era perfecto para la gente de la ciudad, que venía ahí el fin de semana para descansar y bañarse. Hoy, por culpa de unas cuantas fábricas que tiran productos nocivos al lago, no te podrás bañar más. Pero hay muchas atracciones, para los niños, juegos, puedes alquilar una barca y pasear por el lago, comer pescado (de mar) y golosinas, dulces típicos de Guatemala..

En Amatitlán también te puedes bañar en los baños calientes. Son como unas saunas, alimentados por el calor del volcán cercano. Vas ahí y sudas en una salida, la señora te trae laurel y agua caliente para que te laves.

Toda vez que podemos apreciar la creación de Dios en ella y lo maravillosa que luce la naturaleza de esta eterna primavera, cada Chapin se siente orgulloso de la tierra en que el creador nos ha permitido nacer.

Navegar por las aguas del lago y comer un pescado es muy placentero...