El lago subterraneo más grande de Europa
Este lago está ubicado en Saint Leonard, cerquita de Sion, la capital del cantón de Valais. Es un lago de unos 200 millones de años, es el más largo de Europa llegando a medir 300 metros y una media de 20 metros de ancho. El agua suele estar a 8 grados centígrados, incluso es posible bañarse, aunque a pesar de el calor sobrenatural de aquel día de verano, nadie se atrevió a adentrarse en aquellas frías aguas. Está abierto de marzo a finales de octubre.
La entrada es un edificio alegre, lleno de merchandising del lugar, tazas, bolígrafos, obviamente navajas suizas, llaveros, peluches, imanes para la nevera y todo tipo de objetos de colección que el turista pueda llegar a querer comprar de recuerdo. Hay un pequeño bar donde poder comprar bebidas y helados. En la taquilla vino el susto, visitar la cueva costaba 10 francos suizos. Una vez pagada la entrada, queda una larga cola de unos 20 minutos, ya que en cada barca suelen subir unas 20 personas. No más.