La Verrière

Mi hermano y mi cuñada fueron a cenar a este restaurante y vinieron encantados. Estuvieron sentados al lado del piano para un tête-à-tête. Les encantó la cocina y el ambiente de este lugar donde está claro que van a volver con mucho gusto.

Hay que hacer reserva. En mi opinión, la bienvenida que nos dan es muy agradable y además proponen pequeños servicios complementarios para ocasiones especiales (aniversario por ejemplo). Es por lo tanto un bar-restaurante que os aconsejo para las citas, o para salidas entre amigos.