La Tomatina de Buñol

Los orígenes de la fiesta se remontan al último miércoles de agosto del año 1945, cuando unos jóvenes esperaban el inicio de los actos de la fiesta en la Plaza del Pueblo, iniciaron una "trifulca" en la que la gente empezó a tirarse tomates unos a otros hasta que las fuerzas del orden público intervinieron y pararon aquella batalla vegetal.

Al año siguiente, se repitió la historia, esta vez de forma voluntaria, llevándose los tomates de su casa.
Y así año tras año, pese a las prohibiciones, la actuación de la policía que disolvía la reciente tradición, e incluso llegó a detener a los chicos; la fiesta volvía a repetirse uniéndose más participantes y tornándose cada vez más frenética.

El último miércoles de agosto en el municipio de Buñol (Comunidad Valenciana), tiene lugar una de las fiesta más divertidas del año, La Tomatina, el evento más conocido dentro de la Feria y Fiestas de Buñol. En ella, todos los asistentes se reúnen en la plaza del pueblo, a eso de las 11 de la mañana, y cuando suena el disparo de una carcasa, comienza una batalla de lanzamientos de tomates maduros a diestro y siniestro. Al finalizar, tiene lugar el proceso de limpieza con mangueras que duchan a todos los asistentes.

La Tomatina es uno de los acontecimientos más divertidos que se conocen, y es por eso que cada año son más las personas que acuden a Buñol para disfrutar del día, y cada vez más las que repiten. Además, en el año 2002 La Tomatina fue declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional.

Se celebra el último miércoles de agosto en Buñol (Valencia).