E.Sonia Requejo Salces
Una población del valle de Udías
Así es, el municipio de Udías, muy cerca de impresionantes enclaves naturales, como Monte Corona. Que destaca por sus enormes pinares, hayedos y por los rincones de tranquilidad del que se disfruta, y desde este bonito pueblo accedes dada a su proximidad a Comillas o Cabezón de la Sal.
Tras la ruta por el monte, decidimos tomarnos esa merecida cerveza, en el bar del pueblo de la plaza, me recordó los bares con su zona de ultramarinos de antaño.
Me gustó un folleto turístico de los antiguos y de ahí el compartir con todos, la riqueza y diversidad natural, que tiene esta hermosa provincia de Cantabria.
Como no la voy a considerar afortunada, solo hay que ver su esplendida naturaleza y como se encuentra repartida en el plano.
Posteriormente decidí recrearme por su pueblo, como ven el típico montañés. Casonas en piedra con balconadas de tornos en madera, llenas de flores, geranios y hortensias, sin duda se dan de maravilla.
Casas adosadas algunas, con su porche donde aun se encuentran los troncos que alimentaran el fuego de las chimeneas en invierno. Otras encerradas tras esplendidas tapias de piedra con arcadas y posiblemente algún escudo, resguardando la intimidad de sus propietarios, fantásticas.
Destacan la iglesia gótica del S. XV, Pumalverde con capiteles tallados que representan cabezas, ábside abovedado en el crucero, tradición del paso de los romanos por estas tierras y otra iglesia parroquial de la Edad Media.
Un enclave tranquilo y muy bien situado para seguir descubriendo el encanto de estos pueblos.
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