Un lugar muy relajante
Uno de los paseos más tranquilos y relajantes que tenemos en Cantabria es este que va a dar a la Fuentona de Ruente, en el pueblo de esta misma localidad. Puedes dejar el coche justo en el pueblo, al lado del puente que cruza el río y continuar por el camino, dejando el río a la izquierda.
Pasados unos metros, llegas hasta la Fuentana de Ruente, un lugar rodeado de leyendas mitológicas. Es muy curioso este lugar por las “hamburguesitas” o rocas a lo humor amarillo que hay justo al lado de la fuentona. La verdad, es que es inevitable querer bajar a sacarte una foto encima de ellas, sin caerse, ¡claro!