La primera iglesia ortodoxa rusa en España.
Sus cinco cúpulas doradas llaman la atención desde lejos. La iglesia está dedicada al arcángel San Miguel.
Su construcción está siendo financiada por un promotor inmobiliario ruso que vive en Altea. Todos los materiales con los que está siendo construida han sido importados de Rusia. Excepto las campanas, que han sido construidas en Valladolid. No hay otra iglesia como esta en toda Europa. En ella se celebran numerosas bodas y bautizos y esperan que los feligreses ortodoxos rusos que viven en la zona lleguen a mantener los gastos de su iglesia.