Iglesia de Sant Feliu

Después de la Catedral, la Iglesia de Sant Feliu es el principal monumento religioso de Girona, sobre todo por su espectacular campanario gótico-flamígero, que destaca por encima del perfil del casco antiguo. Sus orígenes son inciertos y aglutina elementos arquitectónicos paleocristianos, románicos y góticos. Estos últimos son los más fáciles de apreciar, ya que son los que predominan, aunque la fachada es barroca y bastante más reciente que el resto. A pesar de la falta de unidad estilística, por sus dimensiones y la espectacularidad del campanario, es un punto de referencia en cualquier visita

De las Iglesias monumentales más bonitas que tiene Gerona Capital, es la Colegiata de San Felix; construída en el siglo XIV.

En su arquitectura se ven distintos estilos de construcción; entre ellos el románico en los pilares de la nave centra, el gótico en su campanario y en la nave y el barroco en la escalinata y la fachada.

Esta ubicada en la Plaza de San Felix (Sant Feliu), justo al lado de la leona a la que debemos besar el culo si queremos volver a Gerona o ser buenos Gerundenses.

El templo esta dedicado a Feliz el Africano, un Santo martirizado y enterrado en Gerona

Nada más adentrarse en el casco histórico de Girona, justo en ese momento en el que se empiezan a subir cuestas, te encuentras con una imponente iglesia que, si andas despistado u olvidaste la clase de historia del arte te parece que es la propia catedral. Y no es así.
Es muy bonita tanto por su parte de atrás, que da justo a la entrada de la Plaza de la Catedral, con en su pórtico, con una preciosa escalinata.

Aunque el interior no es lo mismo que el de la catedral, forma parte del skyline características de la ciudad. La piedra blanca con la que está construida resalta entre los demás edificios.

Recién restaurada

Muy bonita. Pasear desde la catedral hasta aquí es un paseo bonito.