Trato familiar es el lujo verdadero
Por mis trabajos varios he podido disfrutar por el mundo adelante de hoteles de lujo, en el que el servicio era exquisito pero distante y frío, y siempre he pensado que cuanto más caro y de lujo deber ser el hotel peor debe ser el trato a los empleados porque se nota que no disfrutan su trabajo.
En el Hotel Terraza tuve la sensación contraria, de que todos los empleados son parte de la empresa y que los más de 75 años que lleva funcionando el hotel han servido para crear un concepto de servicio de primera pero cercano. El hotel está en muy buen estado, se nota que las reformas que han hecho, más que un lifting, han supuesto un rejuvenecimiento total, y el privilegio de estar, el hotel, en primera línea de playa, y con una isla de césped literalmente sobre la playa, en el paseo marítimo de Roses.