Está en un enclave privilegiado, a medio camino entre Santander y Bilbao, al lado de la Reserva Natural de las Marismas de Santoña. Es una antigua casona blasonada y solariega del siglo XVII, cuyas caballerizas fueron transformadas en el actual restaurante. La verdad es que es un remanso de paz, si estás estresado, ya sabes, lectura, baño, en su estupenda piscina y paseos por la zona. Tiene unos jardines preciosos y muy cuidados.
Me fui de escapada con mi novio a Cantabria, que no lo conocíamos, y encontramos este hotel por casualidad en la red. Su web tenía buena pinta, pero lo que nos encontramos, cuando lo encontramos (valga la redundancia..Pero es que está un poco escondido) rebasó nuestras expectativas. El trato, muy atento, las vistas desde la terraza de la habitación con el desayuno por delante, insuperables, y los jardines y el bosque privado, geniales para perderse en ellos. Pero lo mejor de lo mejor.. La piscina semi-cubiertaaaa!!! Así da igual la fecha para pegarte un chapuzón..Además, está muy cerquita de las Marismas de Santoña (dignas de conocer), Santander y el Parque de Cabárceno (una gozada).
Impresionante hotel, super romántico, situado en un paraje maravillosos, las habitaciones son enormes. La cocina espectacular. Tienen un servicio de masajes en pleno bosque que es una maravilla, ideal para los estresados de las grandes ciudades. Además tienes muy cerca diferentes pueblos, como Noja y Laredo para hacer excursiones. Tienen una acojedora piscina, lejos de parecerse a las enormes instalaciones de las grandes cadenas hoteleras.Recomendable 100%.
Destacar las paredes de ortensias que decoran todo el exterior del hotel, nunca las había visto igual. Repetiremos sin duda.
Estuve en el Hotel San Román de Escalante hace 2 meses y me encantó. El Hotel es precioso, los alrededores, la gente... Os recomiendo una cena en el restaurante con el nuevo chef, Erwin creo, buenísimo todo, y un masaje para relajarse en el bosque.
Este hotel ofrece unas 16 habitaciones divididas en 3 suites, 6 superiores y 7 habitaciones todas ellas decoradas con elegancia entre ellos obras de arte y antigüedades. Cada detalle está cuidado, tanto en las habitaciones como en los baños. Este pequeño complejo hotelero está rodeado por su bosque privado, piscina, jardines y bellos paisajes. Ofrece un restaurante de alta cocina internacional.
