Loca por México
Hotel sencillo y limpio
Siempre me ha gustado el centro histórico de la ciudad de México. Hay tanto que ver, tiene tanto movimiento, tanta diversidad de todo: de restaurantes, de comercios, de gente, que tan sólo sentarse a ver la gente pasar es un entretenimiento muy divertido. Para los visitantes, hay además muchas opciones de hoteles para quedarse a pernoctar (porque la verdad es que hay que salir todo el día y nada más llegar a dormir, porque uno no se puede perder lo que pasa afuera del centro de la ciudad capital de un país como México). Hay hoteles de mucho lujo, y también hay hostales modestos y hotelitos a donde llegar por un módico precio.
Por ejemplo, el Hotel Roble, ubicado a dos calles del Zócalo, de la Catedral Metropolitana, unas pocas más calles de Bellas Artes, del Sanborn's de los Azulejos, de la calle peatonal de Madero, de la Alameda Central y de muchísimas cosas más. Es un hotel sencillo y limpio, pero con todo lo necesario para pasar una noche muy a gusto: televisión con cable, internet inalámbrico, caja de seguridad y también un restaurante donde sirven el desayuno, ideal para agarrar fuerzas y empezar a recorrer el centro histórico de esta vibrante ciudad de México. Su personal es muy amable y te puede dar muy buenos tips para recorrer la ciudad.
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