Ubicación inmejorable
En una de mis visitas a Oviedo fui con una amiga que es agente de viajes. No nos alojamos en este hotel, pero tuvimos que acercarnos a que ella realizara una gestión, y la recepcionista fue un encanto con nosotras y nos lo enseñó de cabo a rabo.
El hotel se encuentra en pleno centro, justamente enfrente del emblemático Teatro Campoamor. Es un edificio pequeño y estrecho (aunque han adquirido el solar de al lado para ampliarlo), por lo que no todas las habitaciones tienen fachada a la calle.
Es un tres estrellas, aunque me pareció bastante sencillito, pero muy limpio. Había habitaciones de distintos tamaños, algunas de ellas con sofá cama para hacerlas triples o familiares.