Muy recomendable
Un lujo de ubicación, a un paso de la preciosa iglesia de Sta Mª del Pi y en pleno Barrio Gótico, si tienes suerte el taxi te deja en la puerta, pero la zona es peatonal, llevaba mucho equipaje y lo tuvo en consideración imagino, menos mal!!!
Es un edificio del siglo XIX con 37 habitaciones y tres estrellas al que no le falta detalle para con el cliente, copa de cava al llegar ofrecida por el encantador recepcionista, info turística, habitación con vistas al campanario y dos luminosas ventanas, wifi gratuito y en marcha, merienda en la barra detalle del hotel, en fin, no se pueden más que ofrecer