Regresamos.
Ya es un habitual en nuestra agenda cuando tenemos que coger un avión, por su ubicación cercana al aeropuerto, por el trato recibido, y por qué también podemos dejar nuestro vehículo en su aparcamiento a un precio razonable de 6euros/día.
También por que ofrecen el servicio de lanzadera al aeropuerto para la ida como para la vuelta. Esta vez, por unos cambios que habían efectuado a raíz del covid y nuestros horarios de partida y de llegada no los pudimos aprovechar. Pero ahí están.
Esta vez nos asignaron la habitación 115, cuando entramos tuvimos la primera sorpresa y es que habían efectuado una modernización de las habitaciones de la parte del dormitorio, puesto que los baños los encontramos como antes… o sea perfectos.