Hotel Alfonso VI

Lo mejor que tiene este hotel es la ubicación, justo enfrente del Alcazar, lo que hace que puedas moverte por todo el casco antiguo sin problemas , no tiene parking pero hay 2 en la misma calle, (el más cercano cuesta 14€ el día , el otro 19,90).
Los espacios comunes en el Hotel Alfonso VI están bastante bien, sobre todo la sala situada en el sótano -1, junto al bufet del desayuno, que tiene una ambientación como un castillo de la Edad Media muy conseguida, con sus grandes lámparas y una buena colección de armaduras.
El problema es que las habitaciones están muy anticuadas y sobre todo los baños, y cuando digo anticuadas no quiero decir antiguo sino viejo. Las habitaciones no disponen de mini bar, ni enchufes en la habitación ( sólo en el baño), tiene hiló musical pero no funciona, la decoración está absolutamente desfasada y lo peor el aspecto de los baños que deben de ser de los años 80.

Me gustaría volver, pensamos volver mí esposa y yo

Muy bien y muy contentos salimos, fuimos a Toledo para Diciembre del año pasado y estuvimos cómo 4 noches en el hotel y la verdad muy, muy bien con ganas de volver.

Matrimonio con un niño. Fuimos un fin de semana. La ubicación es excelente, pero en el baño no tienes donde poner un neceser, solo tiene un lavabo con pie. El desayuno muy pobre y la bolleria no había quien la comiera