Las antiguas defensa de esta plaza fuerte son un homenaje a la historia
Más allá de su belleza estética, la viejas piedras defensivas de Badajoz son un recuerdo silencioso de todos aquellos que en diferentes épocas entregaron sus vidas en los diferentes conflictos que jalonan nuestra historia. El desencuentro con Portugal y el protagonismo en todas las guerras peninsulares desde su fundación, convierten casi todos los rincones de las antiguas murallas, en monumentos a miles de combatientes caídos en diferentes guerras, todas ellas cruentas y tremendamente destructivas, para la ciudad y sus gentes.
Mirar hoy esas piedras debe convertirse en un ejercicio de homenaje y recuerdo, convertido en luz. Que nos recuerde, que son nuestras luces y nuestras sombras, las que nos han hecho como somos y nos han traído hasta aquí.