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Fuente Pequeña

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1 opinión sobre Fuente Pequeña

Una piscina natural

Además de por sus originales chimeneas, Alte es famosa por sus piscinas naturales. A las afueras del pueblo, la ribera de Alte es un lugar de ocio y esparcimiento, especialmente en los meses estivales, en el que habitantes y foráneos pueden disfrutar de un día en plena naturaleza, a orillas del río que rodea el arroyo.

La primera de estas piscinas que nos encontramos, siguiendo el Paseo Cándido Guerreiro, es la Fuente Pequeña (Fonte Pequena), donde antaño, las mujeres de la aldea solían ir a lavar la ropa y a recoger agua en sus cántaros. Llama la atención en medio del río una escultura de mármol blanco titulada la Musa del Río, obra de Vitor Picanço, que rinde homenaje a estas mujeres.


Aquí podemos ver un antiguo molino de agua en desuso, que data del siglo XII. El espacio cuenta con un agradable merendero, con mesas y bancos de piedra donde puedes hacer un picnic, así como abundante arboleda. También hay un bar-restaurante. Es un lugar de lo más bucólico, donde se respira paz y tranquilidad.

En la Fuente Pequeña se celebran las Fiestas de Alte en torno al 1 de Mayo.

Si seguimos la carretera, más adelante encontraremos la Fuente Grande, otra zona recreativa similar.
Si tienes tiempo, no dejes de visitar la cascada Queda do Vigario, donde el agua se precipita desde los 24 metros de altura formando un gran lago natural.
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