Un Salto Atrás en el Tiemp
Viajar en Ferry en Hong Kong es probablemente la mejor manera de saborear esta ciudad que tiene dos almas, la china milenaria, y la británica. Cuando la isla de Hong Kong se quedó pequeña, los británicos negociaron con China para ampliar la ciudad al continente, en lo que se llamó los Nuevos Territorios, y se hizo imprescindle crear una red de transporte marítimo que conectara las dos partes de la ciudad.
Hoy en día hay modernas líneas de metro que pasan por debajo de la bahía, pero yo siempre que voy a Hong Kong prefiero el sabor antiguo de navegar en estos ferries simétricos, que no tienen proa ni popa, ya que tal como salen de un extremo del puerto atracan en el otro, y así día y noche.