Daniel Rodríguez Molowny
No se puede transmitir la experiencia...
No se puede transmitir la experiencia de estar dentro de esta cueva.
Probablemente lo más espectacular que he visto nunca. Una cueva enorme, tanto en altura como en anchura, con una apertura al mundo exterior que la ilumina y que crea vegetación interna y unos colores de ensueño. Más que recomendable.