Restaurante caro y de calidad muy mediocre. Menú degustación con pretensiones sin un resultado aceptable. La bodega extensa y carísima. 2,5€ por servicio de mesa. En fin muy decepcionante.
Este señor tenia una taberna hace bastantes años de mucho prestigio, cocina casera, familiar y económica. Clientes hasta la bandera.
Hasta que un día tuvo la "feliz idea" de convertirlo en un sitio fino con suelos de mármol, pero claro, repercutiendo los costes de la reforma en sus clientes. A partir de ahí para mí se acabó El Restaurante El Sordo.
Precios desorbitados para la calidad tan mediocre que ofrecen. Cuidado que te cobran absolutamente por todo, hasta por respirar: nos pusieron varios aperitivos que no pedimos y los cobraron bastante bien. Fuimos dos personas, nos dejamos casi 100€, y salimos con hambre.
Restaurante sordo muy buena comida. Pero para el precio tan elevado que tiene le falta presencia, elegancia, higiene en aseos, muchas cajas de bebida en entrada, parece un restaurante mediático y precios muy elevados. Postre muy simple, ya vistos.
Bueno debería bajar el precio.
El menú degustación de 36 euros es una maravilla, sales lleno y una calidad espléndida.
Gran atención y excelente trato del cliente y del producto.
Una atención inmejorable y unos platos deliciosos.
Ha merecido la pena hacer 70km para ir a comer por el día de la madre. Lo recomiendo.
El Sordo es un restaurante es una empresa familiar, cuyos miembros controlan la cocina, la sala y la repostería, hasta su elaboración, producción, servicio y trato con el cliente. Diariamente ofrece platos como el cordero a la brasa, chuletón de vaca gallega, merluza confitada callosa de Segura
sepia con alubias, caldo con pelota, sopa con pelota y las patatas fritas a lo pobre.
