El nombre es acertadísimo!
No creo que haya un bar de tapas mejor en Granada que El Reventaero, ¡el nombre le viene que ni pintado! Durante mi estancia en Granada, sabiendo que la ciudad tiene una fama bien merecida por sus tapas, pedimos consejo a nuestros amigos y nos lo recomendaron. ¡Qué gran acierto!
Está un poco alejado de la zona más turística de Granada, nosotros nos alojábamos en el Hostal Atenas, en la Gran Vía de Colón y estaba a unos 15 minutillos caminando, pero puedo asegurar que merece la pena. Cuando llegamos el local estaba abarrotado de gente joven y tiene pinta de estar así siempre, por lo que acabamos comiendo en la barra. El camarero no tardó nada en preguntarnos qué queríamos de beber, y menos tardó en preguntarnos la tapa con la que queríamos acompañarla. ¡Buena señal!
Teníamos muchísima hambre, que se fue acrecentando durante la caminata, pero nos llenamos con las dos bebidas y las dos tapas que nos sirvieron. Tienen absolutamente de todo lo que puedas imaginar, la carta es extensísima. En nuestro caso, pedimos dos mini-hamburguesas con papas fritas, otra de nuggets con papas y un bocadillito de morcilla. Si le añadimos dos claras y dos refrescos, la cuenta ascendió ¡a 8€! Increíble y acabamos reventados.