El Chiringo

Se acabó eso de ir a ver jugar a los chavales al fútbol sin poder tomar algo de mientras. Por un módico precio podrás disfrutar de un café bien calentito o de una caña fresca en la terraza de este más o menos improvisado bar mientras ves a los tuyos crecer dándoles patadas a un balón.

Si tienes hambre también puedes picar algo (o si tus niños salen con hambre). A precios asequibles tienes tablas de patatas con salsas, croquetas, embutidos, quesos, etc. No es que sea una maravilla maravillosa pero se deja comer.

Ideal también si has ido a pasear por El Capricho. No encontrarás

Tardaron al menos 1 hora en servirnos unas bravas, la comida congelada, nada del otro mundo. El trato dejaba mucho que desear .Tampoco les funcionaba el datáfono, y no nos avisaron, así que tuvimos que ir con el coche a sacar dinero ( no hay ninguno cerca) y volver a pagar, un desastre de sitio la verdad .