Templo dedicado al Budismo de la Tierra Pura.
El Templo Eko-In es un recinto dedicado al “Budismo de la Tierra Pura” ubicado en Ryogoku, al este de Tokio. Anteriormente, el templo era conocido como “Shoszhuan Muen-ji Eko-In”. Fue fundado en el año de 1657 por Jun’yo Jojin y Tokugawa Ietsuna, este último hijo del cuarto shogun de la dinastía Tokugawa en Japón.
En el año de 1657, el Gran Incendio de Meireki destruyó casi la totalidad de la ciudad de Edo (hoy conocida como Tokio) y alrededor de 100,000 personas perdieron la vida. El shogun Tokugawa Ietsuna construyó el templo Eko-In en conmemoración a las víctimas. Al centro del complejo se erigió una torre llamada “Bannikuza” (que en japonés significa “monumento al millón de almas”) y se realizó una ceremonia encabezada por el sacerdote Jun’yo. A un costado, se construyó un centro de oración para los creyentes en el Budismo de la Tierra Pura.
Hoy en día, el templo es conocido por albergar los restos de quienes mueren sin dejar familiares atrás. Aquí descansan víctimas de desastres naturales, prisioneros e incluso animales.
Para llegar al templo se puede caminar unos cinco minutos desde la estación de trenes “Ryogoku”. El sitio se encuentra a pocos pasos de la arena de Sumo más famosa de la capital japonesa.


