Dulle Griet

Pocos saben que el ‘bar del zapato’ lleva por nombre Dulle Griet. Esta famosa taberna situada en el corazón de la bella localidad flamenca de Gante es célebre porque una de sus cervezas, concretamente la que se venden a razón de un litro en vaso enrome (tan enorme que lleva su propio ‘reposa vaso’ de madera apara que no se rompa), requiere dejar como fianza un zapato para asegurarse de que ni vas a romper el recipiente ni te lo vas a llevar.

La cosa funciona así. Entras al Dulle Griet cuya puerta encontrarás en el 50 de Vrijdagmarkt -casi lo señala la estatua de Jacob van Artevelde que está en el centro del ágora- y pides ‘la cerveza esa del zapato’ (mejor así para evitar confusiones), rubia o tostadas, como prefieras. Acto seguido te quitas una bota (o mejor si engañas a alguno de tus acompañantes para que se la quite) y bajan un cesto que cuelga del techo. Metes el abrigo de tu pinrel ahí y, ¡lo suben al techo para asegurarse de que nadie te lo roba! Luego a la pata coja te vas hasta tu mesa y disfruta de tu bebida, tan grande que tendrás que hacer uso de las dos manos para ingerirla.

Esta es la principal cervecería que recomendaría para cualquiera que vaya a Gante y le guste la cerveza. Claro que debe aparecer en muchas guías turísticas, pero como amante de la cerveza, nunca me había encontrado con una carta tan variada, que me hacía imposible decidirme por una en concreto. No sólo eso es por lo que la recomendaría, sino por la cerveza "de la casa", la "Max van het huis", que se puede elegir del tipo ámbar o tostada. Cuando se pide esta cerveza, creo que de algo más de un litro que tiene la copa, piden un zapato que meten en un cesto con una campanilla que cuelgan y descuelgan del techo (en la imagen, se encuentra entre las dos ruedas que cuelgan del techo); por supuesto, uno anda con el pie descalzo el tiempo que tarde en tomarse esta cerveza y devolver la copa...