Dimitra

Me decidí ir a este restaurante a pesar de que mi campañero estuviera totalmente en contra, pues tanto las opiniones como la puntuación en otras páginas de opinión no eran de las mejores.
Está un poco escondido pero conseguimos dar con él. No se encuentra en la misma calle que indica sino en una perpendicular.
Llegamos a las 14h y tan sólo había una pareja de cervezas. Después fue llegando gente, un grupo de chicos y otras dos personas
Como no sabíamos qué pedir, nos dejamos aconsejar. Nos decantamos por cordero. El plato constaba de dos platos, un entrante de ensalada y un segundo
de cordero a la parrilla con habichuelas y arroz como guarnición. El cordero estaba buenísimo. Y bastante cantidad.