Kris por el mundo
Frente al Mar Negro
Elegir hotel en Sozopol no fue tarea sencilla. No encontraba nada con una ubicación que me gustara y que además tuviera cierto encanto. Al final localicé este pequeño establecimiento muy cerca de la plaza Harmanite perfecto para disfrutar de la playa y también para ver algunos de los lugares que ver en Bulgaria cerca del Mar Negro.
Se puede aparcar sin problema en la misma calle de la entrada y desayunar junto a la piscina del hotel cada mañana. Es un lugar tranquilo, a la sombra, aunque las mesas y sillas no son precisamente cómodas para utilizarlas durante una comida. Aún así, el desayuno era bueno, con zumo natural y varias opciones a elegir.
Nuestra habitación era cómoda, amplia y tranquila, incluso teníamos una pequeña terraza con vistas al mar.
Pero como en tantos hoteles de Bulgaria, lo peor era el baño: la ducha no tenía mampara ni cortina y cada vez que la usábamos había agua por todas partes.
La ubicación del hotel me pareció genial, perfecta para ir a la playa o para salir a cenar en alguno de los muchos restaurantes del paseo marítimo junto a la playa.
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