En honor al pobrecito de Assisi
El Convento de San Francisco de Asís lo encontraréis en la villa jacobea de Sangüesa en la Comunidad Floral de Navarra.
Cuentan que San Francisco de Asís, al regresar de Santiago de Compostela allá por el año 1213, fundó en Sangüesa la Vieja-lo que hoy es Rocaforte-la primera comunidad franciscana.
En 1266, el rey Teobaldo II fundó, en Sangüesa la Nueva una iglesia que más tarde se amplio a convento y lo hizo en honor a San Francisco.
Este edificio acogió reuniones de las Cortes Generales del Reino (1530-1551) y fue cuartel durante la Guerra de la Independencia. Tras la desamortización de Mendizábal en 1835 el convento cerro sus puertas y sus frailes tuvieron que abandonar el cenobio. Más tarde en 1898 se establecieron los Padres Capuchinos, que aún viven en él.