Y los Duques descansan aqui...
Pocas iglesias de la provincia de Sevilla pueden presumir de contener tantas obras de arte en su interior. Por fuera, la Colegiata de Osuna es ocre, adusta y algo sobria. Por dentro, con aires renacentistas y platerescos, reparte sus riquezas en torno a un espacio muy amplio que contiene tres naves con varias capillas, a cual más hermosa.
Se puede llegar fácilmente al éxtasis artístico frente a la de la Virgen de Granada o la del Santo Seprulco, que se encuentra justo encima de los panteones ducales, con un altar mayor que es una atípica explosión barroca representada sobre un lienzo de mármol.
Se ve que nada podía faltar a la familia ducal, y eso es bien visible en su panteón, con columnas de estilo nazarí y paredes de rico azulejo (no es posible sacar fotos).
Por fuera, la Colegiata tiene aires de fortaleza con cuatro grandes contrafuertes cuadrangulares que llaman mucho la atención, y una sola puerta abierta, la del Sol, que se abre a la ciudad y a los extensos campos de cultivo. Tiene otras dos puertas que fueron cegadas en el siglo XVIII.


