Mensajeros de los dioses
Si bien los templos de Nara son de visita obligada, otra de las atracciones de la ciudad son sus ciervos. Estos vagan libremente por todo el parque de Nara, por los alrededores de los templos y se acercan sin temor a los visitantes. En total hay unos 1200 por lo que es prácticamente imposible abandonar la ciudad sin haberse cruzado con alguno. Hay puestos de galletas donde comprar comida para los animales, pero ojo, porque en cuanto escuchan el ruido de una bolsa, da igual lo que haya dentro, irán rápidamente hacia la persona que la tiene para comer todo aquello que pueda tener en la mano.