Chocolates Mis Poemas
A mi no me gustaba el chocolate hasta que comencé a trabajar en turismo, a recorrer y a conocer el verdadero sabor del chocolate. Ahora lo amo, lo aprecio, lo saboreo y me encantan sus historias.
La de Luisa Amanda y su hacienda "Mis Poemas" me encanta.
Este lugar de paz tan sabroso queda un poquito antes de llegar a San José de Barlovento, en el sector Manatí (hay señalización y es fácil llegar).
Ella compró esas tierras junto a su marido porque quería retirarse a vivir tranquila, había tenido una floristería mucho tiempo y ya con sesenta años lo que deseaba era descansar. Resulta que llegó a estas tierras y comenzó a involucrarse con el cacao, esta zona fue una de las más importantes en Venezuela en la época de la colonia, y el cacao era el oro de este país hasta que llegó el petróleo. Pidió un crédito y el gobierno capacitó a 10 emprendedores. De esos solo quedan tres y Luisa Amanda es la más próspera. Fue comprando equipos, sus hijas y yernos le ayudaron, uno de ellos incluso construyó algunas máquinas y fueron perfeccionándose.
Hoy en día hacen unos 22 tipos de bombones rellenos, tabletas con turrón, con sal marina, chocolate blanco, cacao en polvo, mezclas para brownies, de todo para endulzar el paladar. Los bombones de Mis Poemas son crujientes, brillantes, con el toque del chocolate amargo. Son una exquisitez que nadie se puede perder.
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