Parte del antiguo complejo monástico
La iglesia de San Francesco es parte del antiguo complejo monástico de los padres franciscanos y fue construida por primera vez en 1304, en una tierra donada por el príncipe de Taranto Filippo.
Preside una gran plaza frecuentada por turistas y vecinos, y de una factura preciosa, hay que verla.
Tenía características góticas y las mantuvo hasta 1615 cuando experimentó grandes transformaciones, así como en la segunda mitad del siglo XVIII.
Fueron los Padres franciscanos, después de haber reconstruido el convento sobre el proyecto del arquitecto Pietro Magarelli, los que también hicieron que la iglesia fuera otra, la actual fachada fue diseñada en 1883 por el arquitecto Gaetano Jurleo se rehizo para armonizarla con la perspectiva del palacio de la ciudad en el que se transformó el antiguo convento.
El interior tiene una sola nave, una elegante cúpula, y preciosos estucos.
