Templo de la Virgen del Cerrito del Carmén
En la cima del cerrito del carmen se encuentra la iglesia y el torreón que llevan su mismo nombre, alrededor de 1745 Juan José Morales se propuso hacer de este lugar algo diferente y aportó todos sus bienes y recolectó con sus vecinos limosnas para su construcción. Este se convirtió en el atractivo de los paseos dominicales de la comunidad guatemalteca de aquella época además del símbolo del lugar pues podía ser reconocido de diferentes puntos de la ciudad. Años después Juan José Morales quien dio su vida al cuidado de este sitio murió a sus 85 años y fue enterrado ahí mismo al interior de la iglesia en donde aun se conserva su retrato.